Mi carta a los Reyes Magos
Primera semana del nuevo año, y no tengo ni un maldito escrito, decente, que subir a la de web. Muchos empezados, pero ninguno terminado.
En esas estábamos, esta mañana, cuando un gran revuelo de sirenas de policía y ambulancia, me han pillado cruzando una calle. En un principio me he sobresaltado, pero enseguida he caído en que los helicópteros, de hacía un rato y esto, tenían relación con la llegada de los Reyes Magos.
Sus Majestades llegaban a Logroño. Esto me ha recordado la carta, que les escribí hace unos días, con mis peticiones para este año.
Cuando la redacté, no me compliqué mucho la cabeza. Nada de esos rollos de paz en el mundo… Simplemente, les pedí que las personas, recibieran una simple dosis de empatía y un poco de amor por el prójimo.
Me temo, no obstante, que cómo me ha pasado los años anteriores, quién me debía de escuchar, y hacer que esto pasara, está mirando absorto para otro lado. A pesar de ello, con una cabezonería e idealismo, propios, de mis tiempos más jóvenes, yo sigo erre que erre, todos los años. La esperanza, virtud de muchos y cachondeo de otros, me obliga a no cejar en el empeño.
Por eso, este año, les he pedido lo mismo de siempre. Fiel a mi idea de que sí, se pueden arreglar, muchos de los problemas que afligen al mundo.
Ya veremos qué sucede durante este año. Mucho me temo, que no será diferente, al terminado hace unos días. Pero, como ya he dicho, la esperanza y mi cabeza dura, me obligan a seguir intentándolo.
Esta entada se vuelve a subir por cambio en el programa web. Su primera edición fue: 6 de enero de 2023