Relatos con música

La biblioteca de los libros no escritos

La biblioteca de los libros no escritos

Gabriel siempre había pensado que las leyendas urbanas tenían un origen.No creía en fantasmas ni en maldiciones, pero sí sabía que las historias, a fuerza de ser repetidas y retorcidas, llegaban a convertirse en algo diferente, perdiendo su verdadera raíz. La primera vez que oyó hablar de la Biblioteca Infinita fue en una conversación entre…

El vendedor de sueños

El vendedor de sueños

El coche se detuvo junto a la acera, frente a un limpiabotas, que ofrecía sus servicios a la entrada del mercadillo.De la parte trasera descendió un hombre bien vestido, que casi se cayó al tropezar con el limpiabotas.—¡Tú, inútil! ¡Aparta de ahí! He estado a punto de caerme por tu culpa. ¿No sabes quién soy…

El impacto

El impacto

Me desperté sobresaltado. La frente y las manos empapadas en sudor. El sonido del cuerpo contra el metal aún resonaba en mi cabeza. La vibración de los frenos todavía la notaba en mis piernas y brazos. Miré mis manos temblorosas, manchadas de un leve polvo invisible, como si la culpa se aferrara a mí. Me…

Guardiana de la memoria

Guardiana de la memoria

Todos sabían que Elena era la guardiana de la memoria familiar. Desde niña, el desván polvoriento de la vieja casona del pueblo le atraía más que jugar con sus primos en el jardín. Allí, rodeada de fotos descoloridas, cartas amarillentas y grabaciones olvidadas, comenzó a desarrollar su pasión: preservar el pasado de su familia. Aquellos…

Los secretos del bosque

Los secretos del bosque

Parte IV y última Todos se miraron, casi sin respirar, pensando que Bego tenía razón. ¿Qué podrían perder? Dispusieron todo junto al árbol y se sentaron en círculo.Juan encendió la antorcha. Ardió inmediatamente, proyectando su luz danzante sobre el viejo libro que Bego sostuvo entre sus manos. Con voz solemne y casi reverente, comenzó a…

Posada «El Edén»

Posada «El Edén»

A la salida del pueblo, al final de un tortuoso camino, se erguía una posada, discreta y sombría. Era parada y refugio para aquellos a quienes la sociedad había dado la espalda. El Edén, nombre por el que se le conocía, era un edificio rústico, con paredes de piedra que exudaban historia y tejas desiguales…