Sobre mí
Me llamo Luis María Del Busto y nací en Logroño en 1955. Soy de una generación que jugábamos en la calle, no había ordenadores ni videojuegos, la tele aún tardó en llegar.
Eso no ha impedido que esté al día en las nuevas tecnologías.
Qué me gusta
Me encanta la naturaleza y el aire libre. Me considero afortunado por haber podido dormir muchas noches bajo el cielo estrellado.
Aficionado a la agricultura, tengo un pequeño huerto en el que paso buenos momentos. En la tranquilidad del campo se me ocurren muchas de las historias que luego escribo.
Deseo que disfrutéis con ellas.
Soy miembro de la Asociación Riojana de Escritores.
Un poco más
Hasta no hace mucho tiempo, escribir entraba dentro de mis cosas pendientes por hacer en esta vida. No había fecha fija para su comienzo, hasta el 2020, ese año eso cambió. Hoy ya es una realidad.
Dos desastrosos cuentos, que escribí cuando tenía trece años y que tiempo más tarde rompí. Las clásicas redacciones del colegio y del instituto. En el trabajo muchos informes, montones de ellos. Algunos artículos para el periódico. Ahí se acaba mi contacto con la escritura.
Autodidacta, lector incansable y ávido consumidor de cuanta información cae en mis manos. Por ellas han pasado cientos y cientos de páginas sobre el arte de escribir y comunicar.
Llevo toda mi vida en un continuo aprendizaje y ahora he comenzado con la escritura. De siempre me ha encantado aprender cosas nuevas y el documentarme para escribir, me abre nuevas vías de conocimiento.
De momento no tengo claro cual es mi estilo. Escribo que no es poco. Quizás más adelante, si no muero en el intento, pueda definirlo. Ahora, simplemente, voy a seguir escribiendo.
No obstante en los relatos que publico, hay un poco de todo incluso cuentos y relatos para gente joven. Un buen número de cuentos van destinados a ellos. Con un perfil más infantil y asequible para edades a partir de los doce años.
No tengo ningún conocimiento especial sobre escritura. He participado durante el 2022 y 2023 en un taller de relatos de la UP de Logroño. Acabo de terminar un curso de escritura y creación de mundos en la UNED.