Una persona de noche mirando el inmenso cielo. Sola.

Solo debajo de las estrellas

Como todas la mañanas a las cinco, sonaba el reloj para indicarme que era la hora de levantarse. Para cuando llegué a la cocina ya tenía el café recién hecho y en un plato dentro del calentador dos huevos con beicon.

Tenía suerte, el aparato anterior si no me daba prisa en ir a la cocina me quemaba el desayuno, este que tengo ahora lo instalé hace un mes. Lo dejaba todo en su punto y además, me lo mantenía caliente si me retrasaba un poco.

Después de lavarme y recoger me fui al granero. Allí tenía instalada mi oficina, el sitio era espacioso y desde su amplio ventanal que daba al porche, veía todo el valle.

La vista sobre el rancho era total, distinguía perfectamente el arroyo que lo cruzaba con el pequeño lago, los arboles al fondo y en las laderas de los montes. El resto la inmensa pradera cubierta de cultivos.

Nada más entrar en la oficina, lo primero que vi era la pantalla del ordenador con la información del día anterior.

– Situación de humedad en los campos separadas por parcelas.

– Medición de los sensores de maduración y crecimiento de la cosecha, especial atención sobre las parcelas 14 y 21 que eran las mas cercanas a la recolección.

– Análisis de la tierra con los parámetros seleccionados, curvas de estabilización del nitrógeno, fósforo y potasio.

– Estadística tres próximos días de la maduración una vez aplicado el algoritmo de mi finca.

Y luego venía la lista de trabajos preparados para el día.

– Evaluación situación nuevo campo preparado, con una medición aérea de los sensores colocados.

– Adaptación de las nuevas balizas con los sensores térmicos.

– Revisión trampas para las mariposas y comprobación de unidades para reajustar los insecticidas.

– Programación de los drones reparados para vigilancia automática de animales mamíferos pequeños.

He de reconocer que a nivel económico no me iba mal, todo lo que producía lo tenía vendido. La sociedad estatal de agricultores me lo compraba y pagaba. El 80% de lo que producía era por encargo, el resto era de libre elección y su venta también.

Al principio de todo la producción era totalmente controlada, luego se decidió dejar un porcentaje de uso libre de ahí el 20% de libre disposición, de esa forma se incentivó a la gente y se aumentó la diversidad de productos.

Yo por ejemplo me decidí por cultivar verduras no manipuladas genéticamente y producidas del forma ecológica. Tenía todo vendido y muy bien pagado. Lo suministraba todo a domicilio a través una logística especializada. Yo enviaba todo a su almacén y ellos lo distribuían.

Mi único problema y el de muchos otros como yo era la soledad, el rancho estaba aislado en medio de una enorme extensión de tierra sin posibilidad de ser habitada.

Hasta hace tres años había vivido con mi padre, tubo un accidente y murió, mi madre lo había hecho hace unos años.

Una única carretera me comunicaba con la civilización, la ciudad mas cercana estaba a unos 300 kilómetros y nadie quiere venir a vivir aquí en estas condiciones.

Tengo 43 años y no tengo familia. La última vez que vi a una persona fue hace dos años, tuve que ir al médico por un problema que mi robot no podía arreglar.

Solo tengo por toda compañía un perro y un gato. Bueno también esta Hall, es el ordenador que controla todo, lo llamo así en recuerdo del de la película 2001 Odisea en el espacio. Además de ocuparse de la gestión y control de la finca, me da conversación y por cierto no para salir del paso, no. Es capaz de plantear problemas filosóficos que habrían puesto en un apuro a Platón y al mismísimo Sócrates. Está al día de todo, sabe de todo y es lo más parecido a un amigo que tengo en la actualidad, si descartamos al perro y al gato.

Teniendo en cuenta que en muchos lugares viven bajo tierra o encerrados en cúpulas yo no me puedo quejar. Se me olvidaba me llamo John y vivo en un pequeño planeta similar a la Tierra, ahora estamos en el siglo XXXI. En la Tierra ya no vive nadie, se ha abandonado el planeta para ver si se regenera por si solo. Estamos, los que sobrevivimos, esparcidos por diversas partes del universo. En este planeta se vive fundamentalmente en grandes núcleos urbanos, salvo los ranchos y las granjas que están aisladas en las zonas donde fue posible instalarlas.

Este rancho lo crearon partiendo casi de la nada hace tres siglos, para producir y suministrar alimentos a la Tierra. Eran como los antiguos colonos, no había ciudades ni núcleos urbanos solo ellos. Al tener que abandonar la Tierra, se crearon poblaciones y vino gente.

Somos unos quinientos millones de personas ahora, dentro de un año se va comenzar a realizar pequeñas repoblaciones humanas en lugares como el mio, espero con ansiedad ese momento.

Esta entada se vuelve a subir por cambio en el programa web. Su primera edición fue: 1 de junio de 2021