Venganza

Hoy en día no te puedes despistar en la calle ni un tanto así. Eso era al menos lo que me imagino estaría pensando el señor que, vestido de traje, estaba en el bordillo del paso de peatones.

A pesar de estar correctamente situado y que tenía preferencia un repartidor, en motocicleta, había estado a punto de llevárselo por delante.

Si el hombre no hubiera tenido buenos reflejos, a esta hora estaría tirado en medio de la calle. El repartidor ni paró, como sin con él no fuera el asunto. Por poco provoca un accidente y como si nada.

En vez de frenar como los coches que circulaban, que si lo habían hecho. Este repartidor hizo un requiebro esquivando a todos, invadiendo el paso cuando comenzaba a cruzar la gente.

El del traje algo debió de intuir o ver o lo que sea que pasará, el caso es que cuando había comenzado a andar, se paró en seco y dio una especie de brinco hacia atrás. Justo en ese momento evito ser atropellado.

Como pasa hoy en día no hubo que ir muy lejos para que, casualidades de la vida, dos personas hubieran grabado el incidente.

Muy amablemente le pasaron el vídeo a nuestro hombre. Al mirar la grabación, se podía apreciar que en el cajón que la motocicleta llevaba para el reparto, figuraba la propaganda de la empresa. “TORTILLAS MANUEL, dios que tortillas”

En Internet no fue difícil localizar el establecimiento, que por cierto no estaba muy lejos de allí.

Después de dar las gracias a los que se habían interesado por él, se alejó del lugar. Con paso tranquilo, se fue hacia la calle donde estaba el local que figuraba en la motocicleta, Tortillas Manuel.

—Hola, buenos días, el encargado, por favor —pregunto en la barra del local de tortillas, nuestro hombre.

—Soy yo, que desea —le respondió la persona que estaba detrás de la barra.

—Verá, hace unos minutos casi me atropella una motocicleta de reparto de su local —mientras le enseñó al encargado el vídeo donde estaba grabado el incidente—. Debo decirle que no es la primera vez, anteayer me pasó lo mismo. La diferencia es que no pude ver de donde era la motocicleta, pero hoy lo han grabado y sé que era la misma.

El hombre de la barra lo miró detenidamente y luego le devolvió el teléfono.

—No sé qué tipo de broma es esta o que montaje ha hecho usted —dijo el encargado—. Ese vídeo no puede haber sido tomado hoy, ni esa moto pudo tener un percance con usted anteayer. Verá, hace una semana, la persona que conducía esa moto tubo un accidente. A consecuencia del cual falleció y la moto destrozada. No sabemos como pasó, pero lo encontraron detrás de un contenedor en un cruce. Nadie vio nada y no hubo ninguna cámara que lo grabara. Por lo tanto, puedo garantizarle que lo de su vídeo no es posible. No obstante, presente una denuncia en la comisaria, porque lo que me enseña es muy extraño.

Después de darle el pésame al encargado y despedirse de él. Nuestro hombre abrumado por lo que había oído, se fue a sentar en un banco próximo. Las palabras del encargado sobre el accidente del repartidor, le hicieron pensar. Hace una semana él estuvo en una fiesta y se pasó con la bebida. Cuando volvía a casa, se acuerda de que en un cruce oyó un ruido. Paró se bajó, pero no vio a nadie. Siguió su camino sin darle más importancia.

Pensando en ello, volvió a su casa y fue al garaje, en el paragolpes delantero, en el lado derecho tenía un roce de color rojo igual que el de la motocicleta.

Esta entada se vuelve a subir por cambio en el programa web. Su primera edición fue: 14 de octubre de 2022